ROBERTO BOLAÑO
El pasado 24 de septiembre de 2009 tuvimos la más escuálida tertulia del club de lectura jamás vista, desde que yo me incorporé a él al menos. Sólo acudimos dos de nosotras y una nueva adquisición que debió sacar una impresión cuando menos extraña de tan raquítica reunión. Y eso que el autor merecía sobradamente llenar el aforo. Habíamos leído (¿habíamos leído?) uno de los tres libros de cuentos que tiene publicados Roberto Bolaño: "El gaucho insufrible", en mi opinión magnífico. Incluye siete relatos, el primero "Jim" impactante en su brevedad, construye imágenes intensas y giros originales. En todos los relatos aparecen digresiones filosóficas. El segundo relato es el que da título al libro, mi pregunta de por qué éste y no otro se quedó en el aire sin respuesta. Reconocí que era del que mejor recuerdo guardaba, si esto significa que es el más logrado quizás esté ahí la respuesta. Me recordaba a la vez a Benedetti (el anciano de "La tregua") y a Borges por el infinito y los mundos paralelos. Genial, desde mi distancia lingüística, el manejo del coloquial argentino, sin aspamientos. El tercer relato es "El policía y las ratas" entre la fábula y la ciencia ficción. Presupone, erróneamente que entre los animales no hay asesinatos (¿u homicidios?) que son patrimonio exclusivo del ser humano. Emplazo para más información al programa de "Redes" correspondiente. El cuarto: "El viaje de Alvaro Rousselot", de el destacaría algunas líneas: "Todos terminamos convirtiéndonos en víctimas del objeto de nuestra adoración" o "Toda pasión tiende a su propio fin" o esta otra "La señora no iba a llegar hasta las cuatro de la madrugada. Hoy tiene una orgía", quizás para mí los finales son demasiado abiertos. El quinto son "Dos cuentos católicos" el primero de ellos dividido en versículos con frases geniales "Tenía ganas de morirme, pero no para siempre" y una reflexión: uno ve lo que espera ver según su sistema de creencias un monje/un santo/un asesino.
Los cambios de estilo literario de un cuento a otro soberbios. El sexto es "Literatura+enfermedad=enfermedad", describe la antesala de su propia muerte. Explica conceptos obvios "mujer bajita, es decir, de corta estatura" o "a gatas, o sea, a cuatro patas" ¿por qué? Me parece un relato muy complicado, muy filosófico y reflexivo, plagado de intertextualidad, me faltan conocimientos literarios para entenderlo. Un aterrador verso de Baudelaire "En desiertos de tedio, un oasis de horror". Y el séptimo y último "Los mitos de Chtulhu" del que comparto su alegato contra la literatura de best-sellers. La búsqueda de éxito, dinero y respetabilidad y nada de rebeldía contra lo establecido, nada del escritor bohemio, loco, irreverente. También leí los dos relatos que dan título a los otros libros (de relatos): "Llamadas telefónicas" y "Putas asesinas", igualmente excepcionales. A ver si nos animamos y proponemos una de sus novelas como lectura para otro mes. MR.
Así ve Roberto Bolaño el rostro de sus lectores.http://www.youtube.com/watch?v=NiUdeiW6_1w
Reseña de la editorial Anagrama sobre el libro.
El gaucho insufribleBolaño, Roberto
Roberto Bolaño, ese escritor que, como ha escrito Vila-Matas, «abre brechas por las que habrán de circular las nuevas corrientes literarias del próximo milenio», ha reunido en este libro cinco cuentos y dos conferencias. Entre los cuentos, todo ellos imprescindibles, encontramos El gaucho insufrible, es decir, la aventura de Héctor Pereda, un ejemplar abogado argentino que se reconvirtió en gaucho de las pampas, o El policía de las ratas, las andanzas de Pepe el Tira, sobrino de la mítica Josefina la Cantora, y detective en un mundo de alcantarillas. De las dos conferencias, Literatura + enfermedad = enfermedad, es un espléndido entramado de humor e inteligencia, y en Los mitos de Chtulu, con una ironía a veces muy sutil y otras bastante sanguinaria, Bolaño hace rodar unas cuantas cabezas de la escena literaria.
domingo, 4 de octubre de 2009
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